Fundas de Satín: Evita rotura capilar, disminuya FRIZZ

Las fundas de satín, efecto seda, son los accesorios ideal para proteger tu cabello de daños, fricción y rotura capilar por las noches.

❌Una funda regular genera mucha fricción y frizz... y con el paso del tiempo, debilita y quiebra tu cabello. ✅Una funda de satín protege la humedad natural de tu cabello, manteniendo su definición por la noche. Lo que al día siguiente hace que tu cabello esté casi intacto.

La otra alternativa a utilizar la funda de satín, es el gorro de satín. ¡Tú eliges el ideal para tu rutina!

 Incluye un estuche reutilizable Santos Rizos, 01 funda de satín + 01 scrunchie de satín grande gratis con tu compra.

Absolutamente todos los patrones y largos de cabello, mujeres, hombres y niños.

• Si tu cabello tienda a romperse o enredarse con facilidad.
• Si tu cabello se encuentra reseco.
• Si tu cabello ha estado sometido mucho tiempo a tintes, decoloraciones, planchas o secadores…¡Estará más propenso a romperse!
• Si tu cabello pierde mucha forma por la noche.

Reduce el Frizz. El cabello se deslizará fácilmente sobre la almohada, reduciendo considerablemente el roce y fricción. Al descansar sobre una funda regular, o no usar un gorro de satín, el material áspero de la almohada hará que nuestro cabello no se mueva libremente y genere más frizz y un cabello más “desordenado» por la mañana.

Mantiene la humedad. Si notas que tienes la melena un poco reseca, a pesar de estar haciendo todo lo posible por cuidarla con los productos adecuados, quizás, esta pueda ser la causa.Las fundas de almohada de toda la vida absorben gran parte de la humedad capilar. Con una de satín evitarás este problema.

Disminuye la rotura capilar. Una ventaja que se explica por las mismas razones anteriores, porque las fundas de satín al ser más suaves, producen menos tirones en el cabello mientras dormimos, que es donde se producen las roturas.

¿El plus?… ¡Evitas las arrugas en el rostro! Sobre todo las que aparecen en la zona del contorno de ojos.

De preferencia lavar con un jabón muy suave y a mano, pero si se usa en lavadora, lavar en el ciclo más suave. No usar blanqueadores o detergentes con enzimas, abrillantadores o propiedades que puedan resultar abrasivas con el satín. No secar en secadora.